La cuarta cita de la temporada del Mundial de Superbikes 2018 se ha disputado en el mítico circuito de Assen, en Holanda, donde el piloto GALFER del equipo Evan Bros, Randy Krummenacher, ofreció una auténtica exhibición. Randy, que tenía el 6º mejor tiempo de los cronometrados, se vio obligado a salir desde la última posición de la parrilla debido a un problema mecánico. Pero esto no fue un impedimento para que su Yamaha YZF-R6 y los discos de freno GALFER volasen por la pista, logrando remontar hasta 26 posiciones para subir al segundo lugar del podio. De este modo, Randy se sitúa en el segundo lugar de la clasificación general a tan sólo 1 punto del líder. Cabe destacar la 5ª plaza final lograda por Luke Stapleford con su Daytona 675, también equipada con los discos de freno Racing Disc Wave®.
En la categoría Supersport 300, como viene siendo habitual, carrera muy igualada que se decidió en los últimos instantes, con 7 pilotos luchando por la victoria. Entre ellos, los dos integrantes del DS Junior Team, Ana Carrasco, que entró en 4º lugar a tan solo medio segundo del primer clasificado, y Dorren Loureiro, que fue el séptimo. Mala suerte para Mika Pérez (Parkin Go Team), que no pudo finalizar la carrera pese a partir desde la pole position.
Y en la categoría reina de Superbikes, el representante GALFER, Román Ramos (Team GoEleven), terminó la primera manga en 11ª posición y en la segunda tuvo que abandonar debido a una caída.
La próxima cita del WSBK será en Imola (Italia) del 11 al 13 de mayo.